lunes, 21 de febrero de 2011

Ou

Querida Daisy:
Acabo de despertar de mi siesta pre-nocturna por culpa de una pesadilla que me persigue desde hace días.
Déjame que te cuente:
Me encuentro en el Polo Norte, paseando mientras Grimaldi me abanica con una palmera por razones que desconozco, cuando aparece un Furby gigante que intenta matarnos a picotazos. Luego el susodicho furby lanza una bola de fuego por los ojos, y aparece Lord Voldemort en bikini del brazo de Belén Esteban. Entonces me despierto chillando y con lágrimas en mis ojos.
Ayer fui a consultar a un afamado psicólogo, que está obsesionado con que mis pesadillas tienen que ver con mi escasa vida sexual, y se ha ofrecido cortesmente a ayudarme. Le he tenido que parar porque se estaba quitando ya la chaqueta, y he amenazado con demandarle( otro más)
Realmente no creo que sea por eso, es cierto que mis noches de cabaretera en burdeles de Burdeos quedaron muy atrás, pero opino qe tiene que ver con algún mensaje del más allá. ¿Mi padre?¿O quizás Panchito? ¿O es la niña diabólica que tiene poderes extrasensoriales?

miércoles, 16 de febrero de 2011

Mi ascenso al triunfo, Parte 2

Querida Daisy:
Al fin me ha llegado una carta de un director de cine de Europa del Este. Al principio no podía ni creermelo, he tenido que llamar a Winston para que se asegurara de que no fuera un correo bomba de esos que suelen mandarme las fans de Grimaldi ( muy majas ellas)
Al comprobar que todo estaba bien, la abrí y leí que Rufus Macroeconov Wasidewinsky me requería en Rusia para hacer una película.
Mi perfil cuadraba con el de la protagonista principal, y tenía la edad perfecta para interpretar a una jovencita desamparada y perdida en los bosques de Siberia ( aunque no estoy segura de que haya bosques en Siberia)
Tenía planeado ir en un momento en mi jet privado, hasta que leí los únicos requisitos de necesitaba:
-Un látigo
-Un corsé rojo pasión y otro negro con ligas a juego
Creo que el mundo del espectáculo no es para mí, querida Daisy

sábado, 12 de febrero de 2011

Mi ascenso al triunfo

Querida Daisy:
He decidido que quiero hacer con mi vida. Me ha costado, lo reconozco, pero con la ayuda de Lindsay Lohan he averiguado para lo que realmente valgo: quiero ser actriz. Aún no sé cómo, ni si contaré con el beneplácito de mi madre. Grimaldi me apoya incondicionalmente. Se ha mostrado un poco celoso, porque cree que con mi super belleza caucásica tendré muchísimos fans y le dejaré por Robert Pattinson. Pobre Grimaldi.
Para empezar he mandado algunas solicitudes, pero nadie me contesta, seguramente por el gran impacto que produce que alguien de la alta sociedad quiera inmiscuirse en el mundo de bótox y de los díos verduleros del mundo del cine. Por favor, yo no soy así. Solo pienso aumentarme una talla de pecho y quitarme las futuras patas de gallo. No quiero acabar cómo Nicole Kidman.
Hablando de la Kidman, me ha mandado unas magdalenas.

sábado, 5 de febrero de 2011

Cómo no hacer fiestas

Querida Daisy: me he cargado el portátil nuevo.
No sé cómo ha pasado...lo último que recuerdo es que invité a mis compis del cole a tomar unos snacks en el jacuzzi de mi habitación, y se presentaron con Lindsay Lohan. (A ver, no es que me caiga mal ni nada, pero es que no quiero que arruine esa imagen que tiene la plebe de mí, de ser perfecto e inmaculado...)
Bueno pues Lindsay empezó a beberse mi mini bar entero, asique el dejamos para que nos dejase hablar tranquilamente, pero cuando me dí cuenta de que se había terminado las cervezas y empezaba con el vino de Malta y el champagne que compré en París, tuve que pararle los pies. Lo siguiente que recuerdo es despertarme con una manta por la cabeza, con las uñas pintadas de violeta, y con u montón de confeti en mi cuarto. Bueno, y con el ordenador roto. Alguien arrancó la parte de arriba para que sirviera de posavasos para la fuente de ponche de plátano con Chardonay. Creo que he sido yo.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Historias postnavideñas

Querida Daisy, me aburro.
Tras el altercado con la niña del exorcista ( tuve que pagarle 3000 euros y un seguro dental) mi madre me ha cortado la tarjeta de crédito, y no puedo salir a la calle. Bueno, no es que no pueda salir, es que salir sin comprar es un auténtico crimen...
Acabo de recibir otra carta de Grimaldi. A parte de expresar su amor por mí, me cuenta que mi madre se ha echado otro novio, que es gordito, tiene barba blanca y viste de rojo. Me recuerda extrañamente al tipo ese que repartía regalos en Polonia, y al que nuestro mayordomo Winston intentó asesinar por intentar ligar con él. Recuerdo que pasamos mucho tiempo en comisaría esas navidades, y mientras Winston cumplía condena por intento de homicidio( involuntario, él dice que la carta-bomba fue resultado de un experimento nazi para intentar acabar con los señores polacos gorditos porque constituían un peligro para la sociedad) tuvimos que contratar a una chica de un país por ahí perdido para que nos hiciera la comida. La chica se parecía un montón a la criada de Scarlett O´Hara en "Lo que el viento se llevó", y todas las mañanas le pedía que me llamase con tono de voz sureño "Señorita Ecalata" mientras me lavaba los dientes y jugaba al polo, porque lo que decidió autodespedirse, y nos demandó. Menos mal que Winston salió pronto de la cárcel y pudimos empezar a hacer vida normal.
Me pregunto si Mamá se habrá casado con el pervertido polaco. Entre este y Freddy Mercury, mi madre lo tiene crudo para la herencia.